25 junio 2015

Hokusai, de Shôtarô Ishinomori

Shôtarô Ishinomori es uno de los grandes autores del cómic japonés, pero a pesar de ello es un gran desconocido. De hecho, a día de hoy, en España solo se ha publicado la secuela de una de sus obras más famosas, Kikaider, su versión sobre la vida del famoso samurái, Musashi, y el manga al que dedico estas líneas, biografía del celebérrimo autor nipón.

Por mi parte, hacía tiempo que tenía ganas de hincarle el diente a algo del creador de Cyborg 009, pensé en su momento adquirir Kikaider Code 02 que publicó Planeta, pero lo dejé pasar, además de que no es una obra de Ishinomori. Así que cuando EDT publicó Hokusai, me llevé una pequeña alegría pero, aún así, dudé un rato antes de agenciármelo (la economía, la economía...). Una vez en mi colección, lo dejé aparcado más de un año (me lo compré en el Expocómic 2012) hasta al fin encontrar la tranquilidad y el tiempo que necesitaba para dedicarle al volumen de seiscientas páginas.

18 junio 2015

Capitán América: El soldado de invierno

Con cada nuevo año que entra, Marvel Studios nos hace esperar, expectantes, más aventuras de sus superhéroes. Si en 2013 fue Iron Man 3 y Thor: El mundo oscuro, en 2014 le tocó el turno a Guardianes de la galaxia, un grupo superheróico poco conocido para los profanos del universo marvelita, y la película que nos ocupa, Capitán América: El soldado de invierno (Captain America: The Winter Soldier, 2014).

Steve Rogers, el Capitán América, se ha convertido en toda una celebridad en su país, pero no es sino un hombre que nació y vivió en un tiempo muy diferente al actual, por lo que le asaltan las dudas acerca de lo que es correcto o no, así como lo que quiere para él y en quién confiar en una organización tan hermética como SHIELD.

11 junio 2015

Ernest & Célestine

Nos encontramos en un mundo poblado por osos y ratones. El mundo exterior pertenece a los primeros, mientras que las cloacas y cavernas son el hábitat de la civilización roedora. Los osos (y especialmente las osas) odian a los ratones, mientras que a estos últimos se les enseña desde muy pequeños que los osos son seres salvajes y perversos deseosos de llevarse a la mínima oportunidad uno (o muchos) roedor(es) a la boca. Sin embargo, Célestine, una ratoncita huérfana, no cree que todos los osos sean tan terribles. Así que cuando, cierto día, se tropieza con el hambriento Ernest, no ceja en su empeño hasta lograr que sea su amigo.

Conocí la existencia de Ernest & Célestine (Ernest et Célestine, 2012) gracias a que optó a muchísimos premios (y se llevó no pocos, como el César a mejor película animada), rápidamente vi el tráiler y su estilo me engatusó, así que cuando tuve la oportunidad aproveché para verla en pantalla grande. Y solo puedo decir que el filme, dirigido a seis manos por Benjamin Renner, Stéphane Aubier y Vincent Patar, es una de esas  producciones de factura artesana que encandila gracias a una historia sin filigranas ni giros dramáticos, sino que apuestan por la sencillez, y a la vez se apoyan en unos personajes (especial, y lógicamente, en los dos protagonistas) con personalidades bien diferenciadas.