24 noviembre 2016

Plan de escape

 
Ray Breslin se dedica a probar la seguridad de las cárceles, para ello se hace pasar por preso y se escapa de la misma. Un buen día le proponen un misterioso y suculento encargo y, aunque no le da buena espina, decide aceptarlo. Nada más entrar en la prisión se da cuenta de que algo va mal y que está completamente solo, por lo que no tendrá otra opción que aliarse con Rottmayer, un recluso que parece conocer de él, para tener una posibilidad de salir de un presidio que se podría convertir en su tumba.

Soy de los que se quedó del todo insatisfecho con el cameo de Arnold Schwarzenegger en Los mercenarios, y tampoco me satisfizo del todo su mayor presencia en la segunda entrega, y es que había ganas de ver a dos míticos héroes de acción de los 80 y los 90 enfrentarse cara a cara, en igualdad de condiciones y eso es algo que al fin nos ofrece Plan de escape (Escape Plan, 2013), película dirigida por Mikael Hafström (1408) que en inicio se iba a titular The Tomb, y que es la primera en la que los protagonistas de filmes tan míticos como Rambo, Terminator, Rocky o Poli de guardería (entre muchas otras) se ven las caras con el mismo peso protagónico.

La mayor baza del film es esa, sus protagonistas, el ver cómo se dan la réplica, viejunos pero tozudos, con un Chuache simpático y, se le nota, pasándoselo muy bien, y un Sylvester Stallone más serio y solemne, pero demostrando en más de una escena que a pesar de los años se mantiene en forma. La relación entre los dos se va estrechando a medida que avanza una trama sencilla, pero que guarda alguna sorpresa, y no solo sobre la ubicación de la prisión.

Apoyando a los dos héroes de la función tenemos a dos grandes actores y secundarios, como son Sam Neill (Parque Jurásico, El último cazador) y Jim Caviezel (Vigilados: Person of Interest), el primero como el doctor de la cárcel con problemas de conciencia, y el segundo como el despiadado alcaide; a los que hay que sumar un papelillo de Vincent D'Onofrio (Jurassic World), Faran Tahir (American Crime) y Amy Ryan (Un espía y medio), entre otros.

Es una pena que los dos astros de la acción no se encontraran frente a frente en algún proyecto años atrás, cuando estaban en su mejor forma física, pero aunque la acción en Plan de escape no sea la gran protagonista (aunque la hay, y en buenas dosis), sino que el argumento se centra en la planificación de la fuga, se trata de una película igualmente disfrutable, entretenida de principio a fin, con muchísimos tópicos, desde luego, pero también con alguna sorpresa. Un grato encuentro.


LO MEJOR:
-Ver a Stallone y Schwarzenegger, de igual a igual, al fin juntos.
-La huida y esa sorpresita final.

LO PEOR:
-Al momento en el que intentan doblegar al personaje de Stallone le falta intensidad.

¿Quién debería verla?
Cualquier persona que disfrute con las películas de los dos protagonistas, y quien guste del cine carcelario.

¿Y quién no?
Quien busque la quintaesencia del cine de prisiones (en ese caso mejor ver Cadena perpetua, Fuga de Alcatraz o La gran evasión).

2 comentarios:

Santiago Bobillo dijo...

Tal y como comentas es una película muy disfrutable, y a un servidor le entretuvo de principio a fin todo el plan de fuga, con una muy buena química entre Swarzeneger y Stallone, también haciéndome mucha ilusión ver a Sam Neill.

Neovallense dijo...

Sam Neill está un poco olvidado últimamente, trabajando la mayor parte de las veces en producciones de segunda fila, y es un actor que a mí me gusta mucho y creo se merece más papeles si no relevantes, al menos en películas que lo sean (un buen secundario hace mucho por cualquier película).

Por cierto, esperemos ver en alguna peli más fuera de otra entrega de "Los mercenarios" a Chuache y Stallone, un servidor al menos se alegraría ^^